Me llegó un disco que es de promoción
y tiene grabada una sola canción.
Es un CD de avance, no un larga duración.
Redondo, plateado, se presta a confusión
y veo necesario darte mi explicación.
Fui a mi computadora y la prendí con “on”,
si no me equivoco no tiene otro botón.
Invité a un amigo mío que tiene depresión
para escucharlo juntos y que salga del bajón.
Se vino volando desde otra dimensión;
él tiene poderes porque nació en Krypton
y de viaje a la Tierra ligó radiación.
Quise escuchar lamplaca y él ver una de acción
entonces le puse la quinta de James Bond.
Armé un sandwichito con queso y salchichón,
que no era primavera, tan sólo con jamón.
Como él es de la cole hice uno de pastrón
y unté las dos tapitas con mostaza de dijón.
En eso escuhé gritos desde mi balcón:
eran dos morochos alabando a Perón
y para no pelearme les di la razón.
Se fueron tambaleando por la intoxicación
me dijeron “puto”, “careta” y “cagón”.
Mi amigo exigía una reivindicación
porque es un buen muchacho pero algo calentón.
Bajó hasta la calle como una exhalación
y corrió a los negritos hasta un callejón.
Se ve que me distraje o él cambió de dirección
pero en cierto momento ya no entraba en mi visión.
Volví a meterme en casa para no ser fisgón
sintiéndome nervioso como estaba King Kong
cuando se lo llevaron pasando por Hong Kong
y después lo baleó un tipo piloteando un avión.
Cuando estoy inquieto me doy un atracón
como todo lo que veo cual el peor glotón;
empecé mordiendo una mortadela cañón,
prendí la parrilla para asar un morrón
pero me había olvidado de encender el carbón.
Unté una galletita con queso de salmón
y no quedó muy rica porque era una Manón.
Sabía que de postre me esperaba un bombón
y a pesar de eso recalenté un canelón.
El futuro me aguardaba con una indigestión
y cada bocado lo empujaba con Chandón.
Mientras esperaba que volviera el chabón
no me bancaba mi desesperación
porque no era costumbre su desaparición.
Tal vez se colgó un rato en Cristóbal Colón
comprando una remera azul de Billabong.
O por ahí caminando le pegó la ambición,
y terminó sumándose a un grueso pelotón
creyendo que era parte de una maratón.
Para matar el tiempo escuché los Rolling Stones,
pero sólo los discos que grabó Brian Jones
antes de morirse como buen drogón
ahogado en la pileta buscando a Poseidón.
(Y ya freno la historia en este rincón.
Podría seguirla sin autorización.
Quedan mil palabras terminadas en “on”
pero a esta altura ya me aburrí un montón.)
6 comentarios:
DE PIÉ APLAUSO
PARA ESTE AUTOR TAN BONACHÓN
de la P SE CARAJEÓ Y PUTEÓ
PERO ES SU COSTUMBE DESDE HACE UN MONTÓN...
y bué es muy denos gracias por no poner el tema eso habla bien devos
María
Hola Edu. En primer lugar te felicito por De esta noche no pasa, aunque todavía no puedo superar el golpe del adiós a "Cuál Es?".
Segundo, nunca entendí las alabanzas a esta banda "reoriginal" de la cual todos hablan. Es cierto, no debo haber escuchado más de 5 temas (y creo que exagero), pero en el poco tiempo que les dediqué, no creo haberles encontrado la vuelta.
Tercero: Ya leí por decimosexta vez Aerosmith es una mierda y los anteriores ya perdí la cuenta, ¿Tenés en mente algún libro para el corto plazo?
Y por último, ¿Por qué puta no puedo seguirte en Twitter? No es que lo use siempre, pero me molesta el hecho de no poder hacerlo.
Saludos.
@choripanpena
Brillante, como siempron
:)
Bella Lugosi
Edu, éste corte tendría que salir en el CD "Porfiado" ?
Me encantó, pero tenés que saber que Roberto Musso aclaró que el autotune está puesto adrede para falsear la situación. El mismo dijo "El autotune es tan falso que quita esa crudeza que tiene el estribillo de la canción, lo hicimos adrede"
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